La fibra de vidrio es un agente de refuerzo con productos poliméricos (poliéster, estireno, etc.), lo que significa plástico reforzado con vidrio. Está compuesta por delgadas hebras de sílice extruidas a modo de filamentos de diminuto tamaño.
Además de polímeros, las fibras pueden contener compuestos de boro y/o silicatos, confiriéndoles distintas propiedades mecánicas: flexibilidad, resistencia mecánica, térmica y química, etc.
La masilla de fibra de vidrio es el sellante adecuado para los coches que incluyen fibra de vidrio de fabricación, y también en la reparación de piezas y accesorios de este material.
Las aplicaciones más habituales son desde pequeñas reparaciones en paneles y alerones, hasta grandes reconstrucciones de piezas. También se utiliza en reparaciones complejas de elementos interiores con plásticos reforzados (salpicadero), dada su gran adherencia en multitud de materiales y componentes y su gran poder de relleno.
En función de su composición, existen varios tipos de fibra de vidrio:
Incendio: los vapores generados por este producto son inflamables, pudiendo
arder cuando se alcanzan temperaturas próximas a su punto de inflamación.
Inhalación: en función de su composición, los vapores podrían resultar tóxicos
o nocivos.
Contacto con la piel: puede causar irritación cutánea.
Contacto con los ojos: puede causar irritación ocular grave y conjuntivitis.
Sistema endocrino: aquellas fibras que contengan estireno en su composición
podrían causar alteraciones del sistema endocrino de las trabajadoras expuestas,
provocando principalmente daños en el feto.
Otros órganos: aunque no existen datos concretos al respecto, se sospecha
que las exposiciones prolongados y/o repetidas podrían causar daños en los
órganos, y que resulta tóxico para la reproducción.
Deberá ofrecer protección frente a partículas sólidas en suspensión, niebla y vapores generados por los procesos de pintado.
Todas estas mascarillas tienen un tiempo de vida determinado, que dependerá de la exposición al contaminante y de su concentración, y tras el cual deberán ser restituidos.
Existen máscaras completas que evitarían la necesidad de utilizar protección ocular adicional.
Colores
Tanto la banda de color blanco como la letra “P” indica que protege frente a partículas.
Tanto la banda de color marrón como la letra “A” indica que protege frente a gases y vapores orgánicos.
Tanto la banda de color gris como la letra “B” indica que protege frente a gases y vapores inorgánicos.
Tanto la banda de color amarillo como la letra “E” indica que protege frente a gases y vapores ácidos.
Tanto la banda de color verde como la letra “K” indica que protege frente a amoniaco y derivados orgánicos.
Las letras irán acompañadas de los números 1, 2 o 3 según sean de baja, media o alta capacidad.
Se deberá comprobar si el guante protector es específicamente adecuado para el puesto de trabajo (p. ej. resistencia mecánica, tolerancia al producto, antiestático).
Independientemente del tipo de guantes seleccionados, cualquiera de ellos deberá contar siempre con el siguiente marcado:
Vendrá marcado con la siguiente información: